5.3 C
Santa Fe
miércoles, julio 2, 2025

Un exbanquero argentino deberá negociar con Javier Milei por YPF

Noticias Relacionadas

Ya sea por una estrategia político electoral o porque Javier Milei twitea sin filtro ni recomendaciones, la frase de alerta de iProfesional: «Milei confirmó que apelará el fallo por YPF y culpó a Kicillof» esconde un oxímoron, una contradicción solapada, como si dijera al pasar, «un silencio atronador».

Porque apelar el fallo es, prácticamente, continuar con una política de Estado que la Procuración General del Tesoro -los abogados de la Nación- sostiene desde que comenzaron los reclamos judiciales de fondos de inversión de alto riesgo, conocidos popularmente como «buitres», a pesar de ser una metodología que parece no cosechar ningún éxito en los tribunales neoyorkinos donde se dirime el reclamo millonario.

¿Javier Milei sostendrá su «voluntad de pago» tras el fallo de la Justicia de EE. UU.?

De hecho, en mayo de 2023, los ganadores de la sentencia en primera instancia, por la que el Estado argentino fue condenado a pagar más de u$s16.000 millones por haber expropiado mal YPF en 2012, cuando Cristina Kirchner era presidenta, fue el fondo inglés Burford Capital.

Ahora bien, cuando Milei era candidato presidencial y lo consultaban por esta espada de Damocles sobre la economía nacional, solía responder con una frase inglesa «willing to pay», o sea, voluntad de pagar.

El libertario, a fines de 2023, afirmaba, en ese entonces: «Hay un problema porque la plata no la tenemos. No tenemos u$s16.000 millones para pagar. Sí, tenemos el willing to pay, la voluntad de pagar».

A excepción de Milei, ningún otro presidente que debió atender esta causa en tribunales del exterior había hablado nunca de voluntad de pago. Ni Cristina, obviamente, ni Mauricio Macri ni Alberto Fernández señalaron esa posibilidad.

Por el momento, parece que el mandatario nacional no se va a correr de esa decisión de no avalar el reclamo judicial del fondo de inversión, pese a los fallos en contra que acumula el Estado nacional y que genera un conflicto de difícil solución con los Estados Unidos y el mundo financiero.

Pero si se analiza la segunda premisa de las palabras de Milei, la culpabilidad de Axel Kicillof, estaría reconociendo de manera solapada que el reclamo de los «buitres» es justo, a pesar de su decisión de habilitar a los abogados que representan al país para apelar esta medida buscando ganar tiempo hasta el año que viene cuando una instancia superior de la justicia estadounidense falle acerca de la cuestión de fondo.

Porque Milei le enrostra a Kicillof, de manera pública, haber estatizado sin seguir los pasos que estaban establecidos en el estatuto de la compañía. Debería haber realizado una oferta pública para que puedan participar los accionistas de la petrolera, y que representa la justificación por la que la jueza Loretta Preska falló a favor de Burford.

¿Qué dicen los abogados que representan al Estado? Que la expropiación de YPF realizada por Cristina Fernández y Axel Kicillof se hizo bajo el mandato constitucional argentino porque se realizó con una ley de expropiación aprobada por el Congreso Nacional y el procedimiento de traspaso accionario se realizó bajo el paraguas del derecho público, normado por la Constitución Nacional.

En principio, en su afán por competir electoralmente contra Axel Kicillof, y enrostrarle su accionar estatizador, JMilei podría estar enviando señales confusas a los abogados de Burford que quieren cobrar esta suma megamillonaria a como de lugar.

Lobbystas y asesores «fantasmas» con llegada a la Casa Rosada

Uno de los asesores «sin nombre» de Milei se lamenta ante iProfesional: «El momento de negociar ya pasó. Había que hacerlo mientras la apelación de la sentencia original estaba en curso, pero se prefirió esperar porque otros aconsejaron no hacerlo en esos momentos. Sin embargo, cuanto más tiempo pasa es peor porque la jueza Preska acumuló pedidos vinculados al expediente original, de la primera causa, para ver que se le puede embargar a la Argentina. Finalmente, lo que parecía increíble sucedió: prosperó la idea de Burford de quedarse con el 51% de las acciones que el Estado nacional tienen en la petrolera».

Es difícil saber si, para Milei, no habilitar una negociación fue un error. El líder de La Libertad Avanza sabe que trabajar en una posible solución consensuada con el acreedor, que tiene una sentencia a su favor, podría acarrearle problemas con la Justicia penal en el futuro. Algún político denunciatista podría pedir a la Justicia Federal que lo investigue por mal desempeño en sus funciones o algo peor. 

Sencillamente, porque no habría muchos fundamentos para abandonar la misma defensa que encabezaron Cristina y Mauricio durante sus gobiernos, de considerar a la sentencia de Preska como injusta y, de la noche a la mañana, avalar con un decreto la opción de pagar a Burford.

Como sea, los ingleses huelen el olor del dinero y contrataron a un argentino, exitoso en Wall Street, de esos que se definen como «tiburones», Gerardo «Gerry» Mato, para que haga lobby a favor de su causa, que es cobrar, de alguna manera, a la Argentina.

En la zoología financiera, se denomina «tiburón» a un agente del mercado, inversor o institución experimentada, que sea muy agresivo. Que utilicen estrategias avanzadas para sacar provecho de inversores pequeños y menos experimentados, conocidos como «sardinas». El nombre «tiburón» es una metáfora poderosa porque son depredadores en el mercado. Y, uno de ellos nada, silenciosamente, por Buenos Aires.

Gerardo «Gerry» Mato, el «tiburón» argentino encargado de negociar con el Gobierno por YPF

Gerry Mato es un exbanquero que llegó a ser Chairman de Global Banking de HSBC. Con más de 25 años de experiencia en los mercados financieros globales, con base en EE. UU., y antes de HSBC, pasó por Merrill Lynch y fue integrante del Atlantic Council, la US Chambers of Commerce y del Council de las Américas.

Mato es muy conocido por otra fauna local: la política. Conexiones le sobran porque fue anfitrión de muchos de los políticos relevantes de los últimos tiempos. Por su casa recoleta de Greenwich en Connecticut, New York, estuvieron hablando de temas financieros varios exfuncionarios de Mauricio Macri y de Alberto Fernández, en especial cuando el exministro, Martín Guzmán, reestructuraba la deuda externa. 

Del actual gobierno libertario varias figuras y ex personajes que estuvieron en el gobierno de Milei lo conocen, desde el banquero Juan Nápoli pasando por la ex canciller, Diana Mondino o el asesor Darío Epstein. Pero Gerry no tiene afinidades ideológicas. Dicen que también recibió a Horacio Rodríguez Larreta y a Sergio Massa.

Gerry Mato tiene un solo mandato: negociar y persuadir antes del fallo de segunda instancia que apelará Milei. El mensaje que transmite es: Burford Capital quiere cobrar pero negociando. No se trata de poner «un revolver en la cabeza» sino alcanzar un acuerdo por fuera de la Justicia que desactive el litigio.

De ocurrir esa situación, para Burford Capital será toda ganancia, pero para los políticos que avalen esa gestión podría ser el comienzo de un camino empedrado rumbo a un nuevo infierno judicial.

Últimas Publicaciones