El juez Fabián Lorenzini, a cargo desde febrero de 2020 del concurso de la cerealera Vicentin y que recientemente comandó un proceso de cramdown de la firma, resolvió este jueves otorgarle a Grassi SA, dedicada al corretaje de granos, el control de la agroexportadora.
Se trata de una sentencia de 52 páginas en la que el magistrado Civil y Comercial de Reconquista estableció las condiciones que deberá seguir el nuevo dueño de la firma.
Además de rechazar diversas impugnaciones, Lorenzini dispuso “homologar el acuerdo concordatario ofrecido por Grassi SA, en el marco del presente proceso de salvataje, disponiendo la transferencia total de las acciones de la sociedad concursada Vicentin Saic a la sociedad oferente, previo levantamiento de la inhibición concursal, al solo efecto de su realización”.
sentencia homologacion salvataje
Acuerdo con los acreedores
El juez también dispuso “establecer la ejecución inmediata del acuerdo ofrecido a los acreedores, a cuyos fines la sociedad oferente Grassi SA deberá presentar dentro de los tres días posteriores a la notificación de esta sentencia ministerio legis un cronograma detallado estableciendo las fechas de cumplimiento de los pagos y demás cuestiones relacionadas con la ejecución del acuerdo, en todos sus términos, sin perjuicio de las condiciones establecidas para los acreedores que no hubieran optado por alguna propuesta en particular”.
A fines de octubre pasado, Grassi SA había notificado ante el Juzgado de 1ª Instancia de Distrito en lo Civil y Comercial de Reconquista que “alcanzó y superó holgadamente” la mayoría de conformidades requeridas en el cramdown de Vicentin. Y solicitó la homologación y adjudicación de las acciones correspondientes de la agroexportadora.
>> Leer más: Vicentin: Grassi rechazó con dureza las impugnaciones de los «cuasi competidores»
A través de un comunicado, Grassi SA agradeció “el apoyo y la confianza recibida por una enorme mayoría de acreedores” que acompañaron con su voto y conformidad la propuesta que presentaron “para recuperar una compañía de la enorme envergadura y trascendencia que tiene Vicentin para todo el sector agroindustrial”.
Vicentin, paso a paso
El juez había determinado que el ganador del cramdown sería quien lograra antes alcanzar las mayorías numéricas y de capital. Es decir: la mitad más uno de los acreedores y las dos terceras partes de la deuda concursal.
Poco después, el grupo Grassi rechazó las impugnaciones de los competidores en el proceso Molinos Agro y Louis Dreyfus Company (LDC). Y le pidió a Lorenzini que homologara de una vez por todas el acuerdo concursal con el objetivo de materializar la toma de la cerealera.
La corredora rosarina defendió la validez de su propuesta señalando que fue la primera en obtener las mayorías de acreedores necesarias conforme a la ley de concursos y quiebras (LCQ), lo que le otorgaba el derecho a la transferencia accionaria.
